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Responda este test y sepa si está cerca o lejos de padecer TOC

Experiencia

LUN. Trío de especialistas en Salud Mental le toma el pulso al trastorno que el diputado Gabriel Boric puso en el debate.

«Siempre detrás de una idea obsesiva hay un ritual, un conjuro, que la persona realiza para evitar la idea que lo angustia. Incluso hay personas que tienen pensamientos obscenos y su compulsión para combatirlos son los rezos». dice el psiquiatra y Director Comercial de Cetep, Dr. Jorge Ochoa.

El Trastorno Obsesivo Compulsivo (TOC) que tiene al diputado Gabriel Boric con licencia médica abrió la puerta a un problema que padece el 1,5% de los chilenos, según Dr. Jorge Ochoa, médico psiquiatra y Director Comercial de Cetep.

En la película «Mejor… imposible», Melvin, el personaje que iterpreta Jack Nicholson, sufre de este trastorno y es tan antipático que el espectador se ríe de él. En conversaciones diarias, no falta quien dice que lo suyo es un TOC, para describir una simple manía. La diferencia la hace la angustia que padece quien tiene este mal.

«No hay que confundir el TOC con la personalidad con rasgos obsesivos. El TOC es una enfermedad y quien la padece vive con una idea obsesiva de manera egodistónica (le causa malestar)», dice. «Tampoco se puede confundir con la manía. Por ejemplo, una persona que por su personalidad le gusta el orden y la limpieza y que se va a molestar si alguien se lo altera. Si le causa angustia y vuelve a limpiar y vuelve a ordenar de forma reiterativa, hay que poner ojo, algo pasa», agrega.

Hágase una autoevaluación

El Dr. Ochoa confeccionó un test de autoevaluación (disponible en el siguiente link testTOC) para detectar si la persona tiene actos recurrentes por más de una hora al día, que interfieren en su trabajo, vida social, o las relaciones interpersonales que hagan suponer que tiene Trastorno Obsesivo Compulsivo. «Hay preguntas básicas para determinar, como por ejemplo si usted tiene alguna manía o idea que se le repite o incomode», dice el profesional.

También da cuenta de personas cuyo TOC no se nota. «Por ejemplo cuentan patentes de autos terminadas en cero. Está contando feliz de la vida y si alguien lo distrae y pierde la cuenta, empieza de nuevo. Como todas las enfermedades dentro del TOC hay cuadros leves y graves. Grave es aquel en que la persona hace un ritual de limpieza durante toda la noche y al otro día llega a trabajar cansada», describe.

«Siempre detrás de una idea obsesiva hay un ritual, un conjuro, que la persona realiza para evitar la idea que lo angustia. Incluso, que personas que tienen pensamientos obscenos y su compulsión para combatirlos son los rezos», destaca el médico psiquiatra y Director Comercial de Cetep.

Entrevista clínica

Julio Muñoz, psicólogo de Clínica Vespucio, agrega que para realizar un diagnóstico de TOC, la presencia de obsesiones o compulsiones debe ser de carácter recurrente y lo suficientemente grave como para provocar pérdidas de tiempo significativas, una disminución importante de la actividad general o un malestar clínicamente significativo.

«La persona tiene un TOC si cierra el pestillo de la puerta de la casa cinco veces», ejemplifica. «Si lo hace tres o cuatro veces, el sujeto se va a quedar despierto toda la noche, no va a poder dormir porque se va a llenar de ansiedad y va a sufrir», resalta Muñoz.

En la consulta, dice, se le pregunta al paciente qué le pasa si no cierra el pestillo las cinco veces. Según su relato, se destaca el problema. «La quinta vez es la compulsión que les baja la ansiedad», detalla.

Lo mismo pasa con las personas que caminan por la calle sin pisar las líneas que separan las veredas. «Cuando las pisan, sufren porque creen que les va a ir mal en el trabajo», agrega. También relata casos de TOC en que los afectados andan con papeles en las manos para no tocar perillas y limpiar los lugares donde se sientan o tocan. Otros cumplen su ritual compulsivo de ingresar hasta tres veces a una oficina para calmar su obsesión.

Obsesión o hábito

El límite entre un hábito y una obsesión puede ser difuso. Sin embargo, existen algunas situaciones que se relacionan con el contenido de las obsesiones.

«La limpieza, lavado de manos hasta que quedan arrugadas, ordenar objetos a repetición, comprobación, enfermedades imaginarias y contar o repetir palabras en silencio», destaca Muñoz.

Para la psiquiatra Carolina Ibáñez, de Centros Médicos VidaIntegra, hay tratamiento con fármacos antidepresivos y psicoterapias.

«Hay diversos estudios psiquiátricos internacionales que dan cuenta de que es un problema para el 5% de la población a nivel mundial y que las personas no consultan por vergüenza», remata.

Fuente: LUN

Crédito imagen 1:Soplo en el corazón

Crédito imagen 2:psicoactiva.com