Agosto es el mes del corazón en todo el mundo, instancia nacida para reforzar la alerta ante enfermedades cardiovasculares y sus cuidados. Estas enfermedades son la principal causa de muerte tanto en Chile como en el mundo. Según datos de la OMS más de 17,3 millones de personas mueren al año por problemas cardiacos y se estima que el 2015 morirán cerca de 20 millones de personas a causa de éstas.
La mayoría de las enfermedades cardiovasculares son provocadas básicamente por la acumulación de materia orgánica, principalmente grasa y colesterol, en el interior de los vasos sanguíneos. Sin embargo, existen otros factores que influyen. Entre ellos está la Salud Mental de las personas.
Por ejemplo, las personas con enfermedad cardíaca son más propensas a sufrir depresión que las personas saludables. La angina y los ataques de corazón están estrechamente relacionados con la depresión. Algunos síntomas de depresión pueden reducir la Salud Mental y física en general, aumentando el riesgo de enfermedad cardíaca o empeorando los síntomas de ésta. La fatiga o los sentimientos de inutilidad pueden hacer que la persona ignore su plan de medicamentos y no siga el tratamiento necesario para la enfermedad cardíaca. Por lo tanto, padecer depresión aumenta el riesgo de muerte después de un ataque cardíaco.
¿Cómo se trata la depresión en personas que padecen enfermedad cardíaca? La depresión debe ser diagnosticada y tratada por un médico psiquiatra. Tratar la depresión puede ayudarlo a sobrellevar su enfermedad cardíaca y mejorar su estado de salud en general. La recuperación de la depresión lleva tiempo, pero los tratamientos son eficaces. Aunque la mayoría de los tratamientos para la depresión que se encuentran actualmente disponibles son seguros y bien tolerados, debe hablar con su médico del cuidado de la salud sobre los efectos secundarios, las posibles interacciones farmacológicas y otras opciones de tratamiento. Tratar su depresión puede hacer que sea más fácil para usted seguir un plan de tratamiento de largo plazo para la enfermedad cardíaca y adoptar los cambios en el estilo de vida necesarios para controlar su enfermedad cardíaca.
Otro factor de riesgo es el estrés, el que todos hemos sentido en más de una ocasión y puede ser beneficioso, empujándonos a lograr ciertas tareas. Sin embargo, en ocasiones puede ser peligroso, en especial cuando interfiere con su habilidad de vivir una vida normal por un período extenso de tiempo. Usted puede sentirse «fuera de control» y no tener idea de lo que debe hacer, aún si la causa es relativamente insignificante. Esto a su vez puede causarle que usted esté continuamente fatigado, no se pueda concentrar o esté irritable en situaciones normalmente tranquilas. El estrés también puede afectar su salud física debido a los mecanismos internos de respuesta que tiene el cuerpo humano. Si la causa de su estrés es temporal, los efectos físicos usualmente son de corta duración. Mientras más tiempo su mente se sienta estresada, más tiempo su sistema de reacciones físicas se mantendrá activado. Esto puede llevarle a mayores problemas de salud.
Aunque el estrés emocional que surge sorpresivamente, ha sido relacionado con la disfunción severa del corazón en personas normalmente saludables, los científicos no están seguros si el estrés crónico por si solo causa enfermedad del corazón. Lo que sí está claro es que el estrés excesivo puede empeorar factores de riesgo existentes como la hipertensión y altos niveles de colesterol. Los estudios también demuestran que las personas que reaccionan con coraje o que exhiben hostilidad frecuente–una conducta común en los que están bajo estrés–tienen un riesgo mayor de padecer una enfermedad del corazón.
Otro tipo de problema cardíaco asociado a nuestra salud mental es el llamado “síndrome del corazón roto» o cardiomiopatía de Takotsubo, que presenta síntomas similares a los de un ataque cardíaco, como dolor en pecho y dificultad para respirar. Pero normalmente es temporal, no deja secuelas, y no afecta a las arterias coronarias como un infarto, sino al músculo cardíaco.
¿Pero qué lo provoca? Según un estudio publicado a mediados de 2009 en la revista American Journal of Cardioloy, el trastorno parece deberse a un aumento en el nivel de hormonas relacionadas al estrés, como la adrenalina. Las arterias no se ocluyen, sino que es el músculo cardíaco el que se resiente y debilita, hasta el punto de que el ventrículo izquierdo adquiere una forma crónica.
Se estima que entre un 1 y un 2% de los sujetos diagnosticados de un ataque cardíaco sufren en realidad este síndrome. Los expertos tratan de entender el proceso de la enfermedad para ayudar a desarrollar tratamientos más efectivos y estrategias a corto y largo plazo. Entre otras cosas, se ha descubierto que, a diferencia de los ataques cardíacos, que suelen ocurrir en invierno, el síndrome del corazón roto suele darse en los meses de primavera y verano. En un 75% de los casos ocurre después de sufrir un estrés intenso, como un accidente de tráfico, una discusión, la muerte de un ser querido.
Tips para prevenir el padecimiento de alguna enfermedad cardiovascular:
- Normalice hábitos y horarios de sueño
- Evite el cigarrillo
- Distribuya racionalmente la cantidad de comida durante el día (evite ingerir grandes cantidades en la noche).
- Consuma agua, frutas, verduras y carnes blancas.
- Disminuya el consumo de estimulantes tales como el té y el café
- Realice ejercicio físico:
- Defina momentos de descanso y recreación en su rutina diaria.
- Tome regularmente vacaciones.
- Practique técnicas de relajación con regularidad
Desconocer la influencia que tiene nuestra salud mental en algunas enfermedades cardiovasculares puede ser muy peligroso. Por lo tanto, la prevención es fundamental a la hora de cuidar nuestro corazón y así evitar el padecimiento de alguna enfermedad cardiovascular.
En nuestro Centro de Atención Clínica encontrará a los mejores profesionales. Puede reservar o realizar consultas en los teléfonos 22784 0838 / 22784 0839 o al mail contacto@cetep.cl